Uno de los efectos más importantes de los aerogeneradores es la muerte por colisión de miles de aves, ya que los animales voladores no consiguen esquivar las aspas de los aerogeneradores, el impacto produce generalmente una mortalidad directa, o graves heridas que les acaban produciendo la muerte en pocos días. Esto es especialmente importante en zonas altas como las montañas de Cabrera donde se van a instalar los aerogeneradores, ya que son zonas elevadas donde suele haber frecuentemente niebla y los pájaros no logran divisar las palas y chocan contra ellas.

Vídeo de colisión de un buitre con un aerogenerador:https://www.youtube.com/embed/9srPoOU6_Z4?feature=oembed

Este otro vídeo, de mayor duración, resulta de una dureza todavía mayor. En él se ve lo que le ocurre al buitre después de la colisión, sus dolorosos esfuerzos por tratar de volar con el ala rota:https://www.youtube.com/embed/1RcTjdY1aN4?feature=oembed

Foto de una perdiz que murió por impacto contra la torre de un aerogenerador y se partió el cuello. Es una forma menos común de morir en un parque eólico ya que la mayoría de las aves que mueren en estas instalaciones han sufrido un impacto contra las palas que giran a velocidades muy rápidas. Sin embargo, las perdices no vuelan a tanta altura, pero de vez en cuando colisionan contra el fuste. La foto es de septiembre de 2002 en un parque eólico de La Muela (Zaragoza).

La electrocución de la avifauna con las líneas eléctricas de transporte de la energía producida es también muy acusada. La colisión tiene lugar porque las aves en vuelo no ven los cables, no los detectan a tiempo, o bien no los identifican como obstáculos insalvables.

Otro de los efectos es el llamado “efecto barrera”, los parques eólicos suponen una obstrucción al movimiento de las aves, tanto en las rutas de migración como entre las distintas áreas que utilizan para la alimentación y el descanso. Este efecto puede tener consecuencias fatales para el éxito reproductor y supervivencia de distintas especies de aves.

Otro efecto es la destrucción y fragmentación de hábitats que supone la implantación de los macroparques eólicos, el trasiego de personas y vehículos por las pistas durante las obras, pero también después, supone muchas molestias para la fauna que ocasiona que ésta se vea obligada a desplazarse a otras zonas.

Otro factor muy a tener en cuenta es que, la apertura de caminos a lo largo de las sierras producirá un aumento de cazadores furtivos (efecto que se ha observado en otros lugares), quienes encuentran más facilidades de entrada a la zona (haciendo uso de sus vehículos).

Como se puede ver, habrá un fuerte impacto en la fauna lo que hará que disminuya sensiblemente el valor de los cotos de caza de los pueblos y por consiguiente del dinero que éstos aportan

Cabrera esta Despierta... Comparte